"La Viajera del Rio" dedicada por Manuel Yanez a la "Bora" del Rio Orinoco en la voz de Aquiles Machado

Hoy quiero hacer un homenaje a la mas hermosa Viajera del Orinoco… ¡si!... a la que con admirable sutileza, el Maestro Manuel Yánez le canto en el malecón. 
Es la Bora, la frágil Viajera del Río.
Y es que esa flor angelical, de color sin par, es la protagonista de innumerables pasajes en la vida de los pueblos que recorre el Río Padre.
Es fascinante acompañarla en su enérgico navegar desde las playas de Caicara del Orinoco, donde indómitas culturas dejaron grabadas sus huellas en las brillantes rocas color azabache.
Y ver su paso desde las blanquísimas arenas de El Almacén, hasta ver como se apodera de los caños en el Delta Amacuro revelándose soberana de la corriente, Reina del Manamo. Para después seguir sin batallar Río abajo, sola ya sin fuerzas, fragmentándose, en busca del intrépido mar.
Viajera del Río es un vals venezolano creado por el compositor venezolano Manuel Yánez, la pieza es una canción emblemática de la región de Guayana y primordialmente del estado Bolívar. La misma fue compuesta por su autor al observar desde el malecón de Ciudad Bolívar los racimos de la planta acuática Bora (Eichhornia crassipes) también conocida como Lirio de agua o Chupachupa al desplazarse por el río Orinoco. "La Viajera del Río", interpretada por primera vez en 1999 por la niña Chrismir Grau pieza musical que en poco tiempo logró conquistar el gusto de la audiencia y la preferencia de muchos en todo el país y en el extranjero (Extraído de Wikipedia).
Esta es una versión del gran tenor venezolano Aquiles Machado, acompañado entre otros grandes por Aquiles Baez en la guitarra.



Notas sobre Manuel Yanez:

Paseando una vez/ por el malecón/ extasiado me quedé al ver una flor/ perfumando el río… Así comienza la obra cumbre del recordado Manuel Yánez, su Viajera del Río, la cual ya forma parte del repertorio venezolano y latinoamericano de música popular. 



Criado en el sector Centurión, Manuel era hijo de una folclorista de primera línea, doña Catalina Yánez de Yánez, quien dedicó gran parte de su vida a la confección de los Caballitos de San Juan. Ella fue una de las fundadoras de esta hermosa tradición que aun perdura y perduraría en el mes de junio cada año. 

El Juglar del Orinoco, como fue bautizado se inspiró en su ciudad y sus costumbres para escribir más de cuatro mil composiciones musicales en su corta y tardía, pero fructífera carrera musical. 

La pasión por la música, especialmente la composición le vino a Manuel a raíz del inicio de su enfermedad y la muerte de su querida madre doña Catalina en el año 1988, ya al recuperarse por completo de tres paros, uno del corazón, uno del riñón y el otro del pulmón, compone su primera canción y le da por nombre Catalina y Centurión. 

¡¡Desde la Angostura de nuestro inmenso Orinoco!!

Odalys Gazzaneo
'La Viajera de las Riberas'

elorinocodebolivar@gmail.com